Todos comieron hasta saciarse, y llenaron siete canastos con los pedazos que habían sobrado.




REPUESTAS DE FE S.D.A.


SAN JUAN DAMASCENO


ANTÍFONA DE ENTRADA (Cfr. Ha 2, 3; 1 Co 4, 5)


Ven, Señor, y no tardes; ilumina los secretos de las tinieblas y manifiéstate a todas las naciones.


ORACIÓN COLECTA


Que tu gracia, Señor, prepare nuestros corazones para que, cuando venga tu Hijo Jesucristo, nos encuentre dignos de sentarnos a su mesa y de recibir de sus propias manos el pan del cielo. Por nuestro Señor Jesucristo...


LITURGIA DE LA PALABRA


El Señor preparará un banquete y enjugará las lágrimas de todos los rostros.


Del libro del profeta Isaías: 25, 6-10


En aquel día, el Señor del universo preparará sobre este monte un festín con platillos suculentos para todos los pueblos; un banquete con vinos exquisitos y manjares sustanciosos. Él arrancará en este monte el velo que cubre el rostro de todos los pueblos, el paño que oscurece a todas las naciones. Destruirá la muerte para siempre; el Señor Dios enjugará las lágrimas de todos los rostros y borrará de toda la tierra la afrenta de su pueblo. Así lo ha dicho el Señor.

En aquel día se dirá: "Aquí está nuestro Dios, de quien esperábamos que nos salvara. Alegrémonos y gocemos con la salvación que nos trae, porque la mano del Señor reposará en este monte".


Palabra de Dios.

Te alabamos, Señor.


Del salmo 22

R/. Habitaré en la casa del Señor toda la vida.

 
El Señor es mi pastor, nada me falta; en verdes praderas me hace reposar y hacia fuentes tranquilas me conduce para reparar mis fuerzas. R/.
 
Por ser un Dios fiel a sus promesas, me guía por el sendero recto; así, aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú estás conmigo. Tu vara y tu cayado me dan seguridad. R/.
 
Tú mismo me preparas la mesa, a despecho de mis adversarios; me unges la cabeza con perfume y llenas mi copa hasta los bordes. R/.


Tu bondad y tu misericordia me acompañarán todos los días de mi vida; y viviré en la casa del Señor por años sin término. R/.


ACLAMACIÓN



R/Aleluya, aleluya.

 
Ya viene el Señor para salvar a su pueblo. Dichosos los que estén preparados para salir a su encuentro. R/.


Jesús sana a muchos enfermos y multiplica los panes.


Del santo Evangelio según san Mateo: 15, 29-37


En aquel tiempo, llegó Jesús a la orilla del mar de Galilea, subió al monte y se sentó. Acudió a Él mucha gente, que llevaba consigo tullidos, ciegos, lisiados, sordomudos y muchos otros enfermos. Los tendieron a sus pies y Él los curó. La gente se llenó de admiración, al ver que los lisiados estaban curados, que los ciegos veían, que los mudos hablaban y los tullidos caminaban; por lo que glorificaron al Dios de Israel.

 
Jesús llamó a sus discípulos y les dijo: "Me da lástima esta gente, porque llevan ya tres días conmigo y no tienen qué comer. No quiero despedirlos en ayunas, porque pueden desmayarse en el camino" Los discípulos le preguntaron: "¿Dónde vamos a conseguir, en este lugar despoblado, panes suficientes para saciar a tal muchedumbre?" Jesús les preguntó: "¿Cuántos panes tienen?" Ellos contestaron: "Siete, y unos cuantos pescados".
 
Después de ordenar a la gente que se sentara en el suelo, Jesús tomó los siete panes y los pescados, y habiendo dado gracias a Dios, los partió y los fue entregando a los discípulos, y los discípulos a la gente. Todos comieron hasta saciarse, y llenaron siete canastos con los pedazos que habían sobrado.


Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Te pedimos, Señor, que este sacrificio, signo de nuestra total entrega a ti, te sea ofrecido siempre, para que realice la intención que tuviste al instituir este sacramento, y lleve a cabo plenamente en nosotros tu salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio I/A o I/B de Adviento.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Is 40, 10; cfr. 35, 5)


He aquí que el Señor vendrá con gran poder e iluminará los ojos de sus siervos.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Que esta Eucaristía nos purifique, Señor, de toda mancha y nos prepare así a celebrar dignamente la Navidad ya próxima. Por Jesucristo, nuestro Señor.