La gente se alegraba de todas las maravillas que Él hacía.
 
ANTÍFONA DE ENTRADA (Cfr. Is 53, 4)
El Señor ha cargado con nuestros sufrimientos, ha soportado nuestros dolores.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que quisiste que tu Hijo unigénito soportara nuestros sufrimientos, para enseñarnos el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha nuestras súplicas por nuestros hermanos enfermos y concede a cuantos están afligidos por el dolor, las penas y la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que el Señor ha llamado bienaventurados, y de saberse unidos para salvación del mundo, a la pasión de Cristo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos...
LITURGIA DE LA PALABRA
Vivan amando como Cristo.
De la carta del apóstol san Pablo a los efesios: 4, 32-5, 8
Hermanos: Sean buenos y comprensivos, y perdónense unos a otros, como Dios los perdonó, por medio de Cristo.

 
Imiten, pues, a Dios como hijos queridos. Vivan amando como Cristo, que nos amó y se entregó por nosotros, como ofrenda y víctima de fragancia agradable a Dios. Que entre ustedes, como conviene a verdaderos cristianos, no se hable de fornicación, inmoralidad o codicia; ni siquiera de indecencias, ni de conversaciones tontas o chistes groseros, pues son cosas que no están bien. En lugar de eso, den gracias a Dios. Tengan bien entendido que ningún lujurioso, inmoral o codicioso, que es lo mismo que decir idólatra, participará en el Reino de Cristo y de Dios.
 
Que nadie los engañe con vanas razones, pues todas estas cosas atraen la ira de Dios sobre los rebeldes. Así pues, no se hagan cómplices de ellos. Porque en otro tiempo ustedes fueron tinieblas, pero ahora, unidos al Señor, son luz. Vivan, por lo tanto, como hijos de la luz.
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.